domingo, 24 de abril de 2011

Amour Amour

Quien dijo que sería fácil? Nadie, por supuesto, pero cuando te sientas al borde de la cama, comienzas a sentir que todo lo has perdido. Eso es lo que me ha pasado a mí. Nunca pensé que la vida fuera fácil, ni de lejos, pero tampoco pensé que sabría golpear más fuerte que yo. Para mi esto siempre había sido como una pelea, solo que con infinitos asaltos. Hasta el momento me consideraba una buena luchadora, y sabía encajar todos los golpes que mi rival, la vida, me había dado. Había esquivado los problemas que me abucheaban y no hacían más que complicarme la victoria. Pero ahora, tirada en el suelo tras un golpe casi definitivo, comencé a pensar. Y sentí el dolor de todo lo que había perdido, de todo lo que había dejado ir por concentrarme más en cosas sin importancia. Ya me lo habían advertido antes: dale a cada cosa el valor que se merece. Ay... Ojalá me hubiera acordado antes de eso...Claro que... No es fácil recordar las cosas cuando estás enamorada, todo te parece tan fácil, genial y perfecto que no te das cuenta de que no es así. El amor es un engaño. El amor es... Un animal salvaje,  anida en tu corazón roto y va de caza con sus besos. Succiona fuerte tus labios, desgarra tus costillas para labrarse su camino, se deja caer, tan ligero como la nieve. Primero es un amor caliente, luego se vuelve frío, al final duele. Amor, todo el mundo quiero dominarlo, domarlo, al final acabas atrapado entre sus fauces. O al menos eso dicen los de Rammstein, supongo que algo de razón tendrán...
Retomando los pensamientos anteriores, me di cuenta (releyendo mis estupideces) de que para hacer daño primero hay que saber entender y perdonar el daño que te han hecho antes. Supongo que al menos en eso no he fallado, creo que yo he perdonado todo cuanto he podido y no he querido hacer daño... Claro que donde las hay, las toman. Y a hacer daño no me ganan ya, porque ya no siento, ya no hay vida, ya no hay nada gracias a ti :)

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